Buenas, sé que llevo mucho sin venir pero lo estoy intentando.
Esta semana empecé a trabajar y a estudiar y todo, absolutamente todo se ha hecho más difícil. El sitio, que afortunadamente ya conocía, queda a 2 horas de mi casa en transporte público y además hace frío permanentemente así que cuando debo ir a hacer trabajo de campo, las cosas se ponen peores porque uno: el frío me hace mucho mal dos: allá no se puede ni tomar café básicamente porque no hay tiempo. El día de ayer llegué a almorzar a mi casa a las 6 de la tarde y nada había comido desde las 11 am, ni siquiera había tomado agua porque estando en movimiento todo el tiempo, no hay ni dónde entrar al baño. Todo es muy difícil...
... Pero al mismo tiempo estoy entendiendo el verdadero uso de mi profesión y eso me tiene muy feliz porque definitivamente hay mucho por hacer y yo soy quien va a llevar a cabo de aquí a diciembre la mitad de las actividades y demás... De pronto hasta me quede trabajando oficialmente allí, quién sabe.
Por otro lado empecé la universidad otra vez y esto de ver materias atrasadas es lo peor... Es que nada más aburrido que ver clase con niños de segundo semestre cuando uno ya está en octavo. Además madrugar y todo, argh, es incómodo y molesto pero bueno, ya casi voy a acabar.
Y es que dentro de toda esta maraña de cosas estresantes, suceden cosas buenas y es que he descubierto varias cosas. Resulta que al parecer mi problema sí es de insulina y sí, tengo problemas con el azúcar pero todo ha sido maravilloso porque ello me hace ser más consciente de mi cuerpo. Extrañamente ya NO tengo ansiedad por los dulces, de hecho no me da ansiedad de nada y ha sido más fácil para mí comer porque como porciones pequeñas y sobre todo saludables. En ese orden de ideas, ¡bajé 500 gr! Sí, esta mañana me pesé y la báscula arrojó 63.5 kg. Digamos que esta vez no he sentido la dieta, más bien ha sido increíblemente fácil porque bueno, sin dulces todo es más sencillo y además, he estado tomando té y todo ha ocurrido sin inconvenientes.
No, aún no me siento cómoda con mi cuerpo porque la ropa que hace un año me quedaba bien, hoy me queda apretada pero sí, sigo avanzando. He comido mucha proteína, muchas verduras y frutas y lo mejor es que ¡estoy durmiendo bien! Llevo esta semana entre el cansancio y la buena alimentación, 8 horas diarias de sueño reparador que nunca en mi vida había tenido.
Definitivamente todo empieza con el cambio de perspectiva.
Eso sí, sigo en espera con el reto de yoga porque entre universidad y 10 horas diarias de trabajo entre idas y venidas apenas tengo tiempo para leer y dormir. Espero que el ritmo baje un poco para empezar lo más pronto posible.
En fin, son buenas y malas noticias, pero malas que ayudan a que todo mejore.
¡Besos! Y espero volver pronto con más buenas noticias~
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