lunes, 21 de julio de 2014

Día 8: Entre buenas, muy buenas y malas y muy malas

Sí. Hoy ha sido un día difícil.
Tengo un dolor punzante en el abdomen bajo, a la izquierda, pero sé que fue un pésimo estiramiento porque anoche me sucedió así que mis abdominales pasaron para el viernes (o si me recupero pronto, el miércoles pero no es probable). Además, llegué y las escaladoras y elípticas estaban ocupadas y tuve que usar la bicileta vertical, quemando en 10 minutos apenas 30 calorías... En la escaladora quemo 100 en ese mismo lapso así que a fin de cuentas, quemé apenas 400 calorías en el gimnasio y además se dañó una máquina y justamente era la que tenía que usar hoy así que tampoco pude hacer esa serie... Tuve que compensar todo eso cuando llegué a mi casa haciendo 30 hora más de ejercicio y terminé quemando pocas calorías.
Sin embargo lo malo no termina ahí. Tuve que salir toda la tarde lo que dificultó mi dieta porque al no poder comer nada, me han ofrecido una rebanada de torta y me la he comido, me han ofrecido 2 panes pequeños, un paquete de galletas wafer y una porción de 100 gr de arroz mixto y lo he comido porque tenía mucha hambre (salí de mi casa a las 13:00 y llegué a las 19:30) así que mi dieta se ha ido por la borda el día de hoy.
La siguiente situación se ha vuelto más bien mi karma y es que debo quemar aproximadamente 2200 calorías diarias ¿cómo lograr eso? No lo sé, pero si quiero perder grasa a un buen ritmo, esta ha de ser mi meta diaria. La suma va en 1000 de las comidas, 600 que queme en el gimnasio ¿y cómo quemo las otras 600? Es casi, totalmente imposible hacer eso (al menos para mí) pero voy a tratar de quemar al menos 2000 a ver cómo me va.
Por otro lado, lo bueno es bueno. Aún sigo motivada porque la ropa me está quedando un poco holgada, es decir, la ropa que me quedaba justa me está quedando cada vez más holgada sobre todo en el abdomen y me siento como si realmente, realmente esta transformación sacara cosas buenas de mí que no sabía que tenía, cosas como la perseverancia, la fuerza, las ganas, la voluntad y un montón más que no puedo creer que me estuviera guardando.
Mi autoestima sigue creciendo aunque de a poquitos... O sea, crece cada que me pongo algo y me doy cuenta que me queda grande o algo que me quedaba apretado ahora me quede mejor. ¿Y saben qué es lo que más me gusta? La idea de que realmente me puedo querer y me estoy empezando a querer porque este cuerpo que tanto tiempo odié, me ha demostrado que puede lograr muchas cosas y que es valioso, pesando 60.5 kg o mi peso ideal pero es valioso porque me permite continuar transformándolo.
Sé que el camino no será fácil y sé que perder lo que debo perder será un largo camino (sé que me tomará al menos 3 meses, es decir, 2 meses y medio más) en el que voy a encontrar obstáculos y grandísimas satisfacciones ¿pero saben? No me importa, porque voy a seguir esforzándome el tiempo que sea necesario para lograrlo y me voy a levantar todas las veces que sean necesarias para seguir.
Una de las cosas que mi novio me dice siempre es que él me quiere independientemente de mi peso, de cómo me vea, me sienta o me quiera y la verdad, quiero quererme para entender qué es lo que ve en mí porque yo también quiero verlo.
En fin, ni me molestaré en poner mi comida de hoy porque qué vergüenza pero fueron casi 1500 calorías.

¡Tengan buena noche!

No hay comentarios:

Publicar un comentario